Los datos publicados hoy por el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) muestran que el paro ha aumentado en 203 personas en La Rioja, lo que sitúa la cifra total de desempleados y desempleadas en 14.251. Aunque es un 1,45 % menos respecto al mes anterior, UGT La Rioja lamenta los malos datos y apuesta por impulsar políticas activas de empleo para facilitar la inserción laboral de las personas desempleadas.

Sin embargo, la estadística correspondiente al año 2022 sigue siendo buena: la tasa de paro se sitúa en el 9,04 %, mientras que en enero de este mismo año era del 9,69 %. Además, los datos del SEPE indican que hay 986 personas desempleadas menos, y el porcentaje de contratos indefinidos sobre el total se sitúa en el 36, 22 %.

Además, el paro aumenta tanto en hombres (+134), como en mujeres (+69), pero la brecha sigue siendo grande en cuanto a desempleo: de las 14.251 personas paradas, 8.668 son mujeres y 5.583 hombres.

El paro sube en todos los sectores respecto al mes anterior, exceptuando al colectivo de Sin Empleo Anterior (-16). Así, crece en el Agrario (+34), Industria (+43), Construcción (+22) y Servicios (+120). Desde UGT La Rioja esperamos que la campaña de Navidad ayude a fomentar la contratación especialmente entre este último colectivo, tras unos años marcados por las restricciones de la covid-19.

Pese al aumento del desempleo, la afiliación a la Seguridad vuelve a aumentar en 13 personas en La Rioja, pasando de las 103.406 personas del mes pasado a los 103.419 en noviembre de 2022.

Desde UGT La Rioja recordamos que casi la mitad de las personas desempleadas llevan más de un año buscando empleo, mientras que un tercio lo hacen desde hace más de dos años.  Por ello, UGT reivindica la importancia de dotar a los Servicios Públicos de Empleo de recursos necesarios para que puedan desarrollar su labor de manera eficaz, e impulsar Políticas Activas de Empleo con programas y servicios que se adapten a las necesidades específicas de cada persona, brindándoles así la posibilidad real de lograr una rápida y adecuada inserción laboral.  

Asimismo, en un momento difícil con un crecimiento de la inflación y del coste de la vida desbocados, es fundamental reabrir las negociaciones con la patronal para cerrar los miles de convenios bloqueados y alcanzar un acuerdo general de salarios.

El Gobierno debe actuar e incentivar la subida de los salarios e ingresos de los hogares, comenzando por elevar el SMI y, a la vez, reforzar el escudo social, destinando más medios a combatir el aumento de la desigualdad.

El aumento medio del IPC en lo que va de año es del 8,8%, mientras que los salarios han aumentado apenas un 2,64% hasta octubre. Esto supone una pérdida de poder de compra de 5,7 puntos porcentuales.

La inflación está lastrando la demanda de los hogares, algo que ya ha afectado en el tercer trimestre de 2022 al crecimiento económico y que perjudica a la recuperación tras la pandemia y la invasión rusa de Ucrania. 

El aumento del nivel general de los precios viene provocado por el incremento de los márgenes de beneficios que están realizando empresas. En este sentido, UGT y CCOO hemos impulsado intensas movilizaciones durante otoño y, de continuar la negativa a implementar incrementos salariales dignos, sólo quedará continuar con el conflicto. 

En definitiva, UGT reclama que haya un reparto de la riqueza más equitativo y que no sean las personas trabajadoras quienes paguen las consecuencias de una crisis económica de la que no son culpables, como ya ha sucedido en situaciones anteriores.